Luisa Fernanda Sánchez Giraldo
Licenciada en Matemáticas de la Universidad Pedagógica Nacional
Mauricio Alberto Niño Navarro
Licenciado en Pedagogía infantil de la Pontificia Universidad Javeriana

La diversificación en la educación media: el núcleo de profundización

Miradas a la educación

La educación media es el último nivel escolar que consolida las competencias desarrolladas durante la educación básica; es un momento vital para que las y los jóvenes se preparen para afrontar los retos del tránsito a la educación superior, a otras rutas formativas o al mundo de trabajo. Según el espíritu de la Ley 115, este nivel educativo incluye una formación más variada, especializada y profunda que la educación básica, y ofrece dos tipos de programas: académicos o técnicos, de acuerdo con las competencias que se buscan desarrollar.

Es la etapa de consolidación de los aprendizajes y competencias desarrolladas en la educación básica y secundaria, desarrolla habilidades generales y específicas que aportan herramientas en el tránsito hacia la educación superior y el mercado laboral. Diversos estudios (CAF y UNICEF. 2021; Busso, M., J. Cristia, D. Hincapié, J. Messina y L. Ripani. 2017) han reconocido el valor de este nivel educativo en la adquisición de habilidades para el trabajo y la vida. En la educación media los estudiantes deben desarrollar unas habilidades específicas que serán útiles para avanzar en sus trayectorias educativas, a partir de sus perspectivas de vida, sus preferencias, gustos y expectativas a través de procesos de orientación socio ocupacional.

Las y los jóvenes presentan retos relacionados con sus trayectorias de vida. Estos retos incluyen el fortalecimiento de competencias básicas conforme a las dificultades con que pueden llegar de la educación básica (primaria y secundaria), que obstaculizan el desarrollo de sus procesos educativos; el acople con las exigencias del nivel educativo, y el desarrollo de competencias y conocimientos más especializados. A diferencia de la educación básica, que tiene un carácter obligatorio más generalizado en la población, la educación media tiene el reto particular de garantizar la continuidad de las trayectorias educativas ante el costo de oportunidad que significa para las personas seguir estudiando.

Bogotá apuesta por fortalecer las competencias del siglo XXI, entendidas como el conjunto de conocimientos, habilidades, aptitudes y actitudes que requieren los jóvenes para afrontar los desafíos personales y laborales en la construcción de perspectivas de vida.

Estos marcos de comprensión implican repensar los procesos de articulación curricular a nivel de las IED, sector productivo y formación posmedia. Estudios realizados sobre la formación de los jóvenes en educación media, aportan información sobre la baja pertinencia de los currículos escolares respecto a las necesidades del sector productivo y la educación universitaria (Ritterbusch, León, Gutiérrez y Maldonado 2016). El primero centra sus esfuerzos en el desarrollo de habilidades de estudio; el segundo requiere el desarrollo de habilidades blandas, emprendimiento, competencias básicas y personalidad apropiada; y la educación superior, en el desarrollo de la autonomía, actitud crítica, competencias ciudadanas, resolución de conflictos y trabajo en equipo.

La desarticulación que se observa en la educación media afecta la trayectoria educativa y de vida de los estudiantes al limitar su acceso y permanencia a la educación posmedia y al empleo. Esto obedece a las debilidades con las que ellas y ellos finalizan la media en relación con el desarrollo de las competencias del siglo XXI, necesarias para acceder a la educación posmedia, al empleo y al emprendimiento.

En este escenario, cobra relevancia la articulación del nivel de educación media con los programas de profundización posmedia y el sector productivo, pues son muchas de las competencias que requieren los estudiantes para su ciudadanía o para trabajar al finalizar grado 11, y el desarrollo de estas depende del aprendizaje mediado. El IDEP (2006) publicó un estudio realizado en el Distrito, con la participación de tres IED por cada una de las 20 localidades de la ciudad. Este estudio destaca la importancia de articular las instituciones educativas con el entorno laboral y fortalecer desempeños laborales que tengan mayor impacto en el mundo del trabajo: “usar en el trabajo conocimientos, destrezas y valores, optimizar recursos de dinero, manejar con propiedad lenguajes de trabajo, cuidar insumos, herramientas y equipos, hacer el trabajo según las instrucciones recibidas y contribuir a un clima de confianza en el trabajo”.

Así mismo, señala que se debe hacer énfasis en aquellos desempeños a los que menos prestan atención las IED, los cuales son: “manejar con propiedad lenguajes de trabajo, optimizar recursos de dinero, manejar situaciones conflictivas con diplomacia y tacto, asesorar a otros en la toma de decisiones, liderar sistemas de trabajo complejos y manejar el tiempo autónomamente” (IDEP. 2006). De esta forma la educación media avanzaría en consolidar unos programas de profundización con el SENA y conseguir que la educación posmedia sea más pertinente y aporte a la mayor retención en la posmedia y mayor enganche en el sector productivo.

Para afrontar estos retos se ha avanzado en las siguientes prioridades de política en la educación media de cara a la diversificación de la oferta: en primer lugar, armonizar los currículos para aportar a la formación en competencias y habilidades especializadas para el desarrollo personal, educativo y laboral, y que están relacionadas con las posibles trayectorias de los estudiantes; y en segundo lugar, diversificar la oferta de formación del núcleo de profundización de manera que atienda a las demandas de la actualidad global y el sector productivo.

Armonización curricular y fortalecimiento del núcleo de profundización

Profundizar en el desarrollo de competencias en el nivel de educación media, implica ahondar en procesos que permitan generar distintas maneras de ampliar el espectro de oportunidades de los estudiantes desde diferentes perspectivas. Atendiendo a ello, la armonización curricular se aborda como un proceso colaborativo entre pares académicos, que desde su saber disciplinar y el nivel educativo que acompañan, establecen consensos que conllevan a la identificación de elementos de convergencia en pro de la pertinencia curricular, favoreciendo trayectorias educativas satisfactorias y exitosas en la educación superior.

La armonización implica el análisis de información de los y las estudiantes antes de iniciar el proceso formativo, con el propósito de reconocer el nivel de desarrollo de las competencias mínimas requeridas y a partir de ello determinar las áreas que pueden ser objeto de revisión e identificar las posibles acciones a implementar en los procesos de ajuste curricular en las IED. Lo anterior implica, el planteamiento de estrategias que, desde contenidos o aprendizajes, determinen el conjunto de actividades a partir de las cuales se organiza el currículo escolar con el objetivo de garantizar el tránsito y la trayectoria educativa de manera eficaz y completa.

Así, lograr una educación media que propenda por una oferta formativa más diversa y pertinente conlleva identificar y fortalecer elementos básicos desde el núcleo común (áreas obligatorias y fundamentales) para el desarrollo de habilidades y competencias generales que después se articulen en el núcleo de profundización para potenciar el avance de competencias específicas de áreas desde las líneas de profundización o las competencias laborales para el caso de la media técnica y la articulación con el sector productivo. Para ello, se retoma el análisis puntual de las habilidades del siglo XXI y las competencias laborales.

En este marco, el núcleo de profundización, como una construcción propia del Distrito, se define como una estructura complementaria a las áreas obligatorias y fundamentales, la cual busca que las y los jóvenes desarrollen competencias generales y específicas que aporten a su tránsito a la vida posmedia. En este sentido, Bogotá cuenta con una oferta que pone un acento particular en las competencias generales o laborales, según los contextos institucionales y de las comunidades educativas de los colegios oficiales:

Las especialidades técnicas como propuesta curricular que prepara a las y los estudiantes para su tránsito a la vida posmedia

La articulación de la educación media es un proceso que tiene como propósito favorecer el mejoramiento de la calidad y la pertinencia de la oferta de las instituciones educativas, así como abrir opciones de continuidad educativa a sus estudiantes en la educación superior o en la educación para el trabajo y el desarrollo humano.

Las especialidades técnicas son diseñadas en las instituciones educativas del Distrito de carácter técnico y tienen como propósito brindar formación calificada a los estudiantes para su desempeño laboral en especialidades. Este proceso implica la coordinación con el Servicio Nacional de Aprendizaje, SENA u otras instituciones de capacitación laboral o del sector productivo.

Las líneas de profundización como un camino para la continuidad educativa

Las líneas de profundización son construidas en las instituciones educativas del Distrito de carácter académico y buscan que los estudiantes profundicen en aprendizajes de las diferentes áreas del conocimiento. Se proponen como áreas complementarias, en cuyo caso no se pueden tener como criterio de promoción; o como un conjunto de asignaturas dialógicas que se integran a las áreas fundamentales, de manera que se pueden incluir en el Sistema Institucional de Evaluación de Estudiantes a través de la asignación de porcentajes al interior de las áreas.

Universidad en Tu Colegio, como una opción para aumentar estándares de calidad a través de la formación técnico profesional

Universidad en Tu Colegio (UTC) es un esfuerzo conjunto entre la Agencia Distrital para la Educación Superior, la Ciencia y la Tecnología (Atenea) y la Secretaría de Educación del Distrito que busca ampliar las estrategias de articulación entre la educación media y la educación posmedia, brindando la oportunidad para que las y los estudiantes de las Instituciones Educativas Distritales (IED) puedan cursar en paralelo con la educación media, programas de formación Técnica Profesional (TP) ofertados por Instituciones de Educación Superior (IES) como parte del núcleo de profundización.

Reflexiones de cierre

A partir de la comprensión del núcleo de profundización del nivel de educación media, el Distrito ha entendido que más allá del conocimiento específico, lo que importa son las competencias de Siglo XXI: las destrezas, conocimientos y actitudes, así como las capacidades para enfrentar exitosamente los nuevos retos que imponen el contexto. Sumado a esto, se resalta el papel que ha jugado el sector productivo para aportar a la oferta formativa a la que puedan acceder las y los estudiantes, en tanto aporta a la comprensión de la realidad que vivirán al finalizar el nivel de educación media, así como aumentar las posibilidades de inclusión social y laboral de la juventud de Bogotá.

Otro de los elementos que se han estructurado a partir de la experiencia, es la comprensión de la formación integral en un sentido amplio, pues se reconoce que esta debe ir acompañada de múltiples estrategias para que los jóvenes aprendan a tomar decisiones, aprendan “a aprender” continuamente y se concentren en los propósitos de sus estudios.

Lo anterior, atendiendo a procesos que permitan definir los perfiles de egreso de los estudiantes, vinculando sus necesidades, intereses y expectativas. El reto de fortalecer la armonización curricular del núcleo de profundización con otros grados, con la educación posmedia y con el sector productivo requiere de otros esfuerzos en torno a la actualización de las políticas educativas con el fin de promover la priorización de competencias y capacidades que necesitan las y los jóvenes para acceder a la educación posmedia, al empleo y al emprendimiento.

Referencias

Busso, M., Cristia, J. P., Hincapié, D., Messina, J., & Ripani, L. (2017). Aprender mejor: políticas públicas para el desarrollo de habilidades. Inter-American Development Bank.

CAF. (2021). Sistematización de iniciativas de articulación entre educación y trabajo destinadas a adolescentes y jóvenes en Uruguay. https://scioteca.caf.com/handle/123456789/1733

Ritterbusch, A, León Giraldo, S, Gutiérrez, J y Maldonado Carrizosa, D. (2016). La visión del sector empresarial de la educación media. Bogotá: Universidad de los Andes, Escuela de Gobierno Alberto Lleras Camargo.

IDEP. (2006). Contribución de la educación media al desarrollo de competencias laborales generales en el Distrito Capital.

UNICEF (2019). Trayectorias educativas Colombia. https://www.unicef.org/colombia/trayectorias-educativas.