Carlos Alberto Reverón Peña
Subsecretario de Acceso y Permanencia de la Secretaría de Educación de Bogotá.

Infraestructura educativa para el Siglo XXI: más allá de las cifras

Miradas a la educación

Colegio Guillermo León Valencia 

La importancia de invertir en nueva infraestructura

Diferentes estudios coinciden en que las condiciones de infraestructura escolar son un factor relevante en los procesos educativos: el acceso a colegios más cercanos a los lugares de residencia de los estudiantes, la asistencia y permanencia, la motivación y el clima escolar, la trayectoria educativa e incluso los resultados del aprendizaje. La investigación de Durán-Narucki (2008) identifica como la condición de los edificios de las escuelas primarias de Nueva York, luego de controlar por condiciones socioeconómicas y docentes, afectó la asistencia promedio de los estudiantes y por dicha vía los resultados en pruebas académicas. De igual forma, Bayona (2016) encuentra que colegios con mejor infraestructura, con aulas especializadas y laboratorios, reducen las tasas de reprobación escolar.

Otros estudios muestran la relación de las condiciones de infraestructura en el clima escolar. Maxwell (2016) encontró que las condiciones de infraestructura se relacionan con los resultados académicos a través de la percepción del clima escolar y Bowers y Urick (2011) aunque no encuentran un efecto directo del estado de las instalaciones sobre el rendimiento estudiantil, sugieren que la infraestructura podría afectar procesos intermedios como el clima escolar.  Además de lo anterior, otros estudios relevan la importancia de la infraestructura escolar en la identidad escolar, el uso comunitario, la flexibilidad y capacidad de adaptación, interacción social y calidad del ambiente de aprendizaje (BID - Aprendizaje en las escuelas del siglo XXI)

Por tal motivo, diversos gobiernos, y en distintos niveles, como lo muestra Finnegan (2023) para el caso de secundarias inglesas, implementan acciones relacionadas con la importancia de los espacios físicos para mejorar la calidad educativa.   

El problema de las infraestructuras educativas en la ciudad[1]

Bogotá tiene históricamente un rezago y una distribución heterogénea y desigual de la oferta educativa en la construcción de infraestructura educativa, como lo tiene el país,.  A pesar de los avances en construcción de colegios en los últimos 30 años, aún presenta una combinación de situaciones problemáticas: infraestructura física muy antigua en algunas zonas (cerca del 25% de las sedes en Bogotá se construyeron antes de la década de los 80) mientras que en otras han ocurrido procesos de renovación de la infraestructura, la existencia de zonas deficitarias (particularmente en el borde occidental de la ciudad) paralelo a zonas de sobreoferta de cupos, o la escasa disponibilidad de equipamientos en localidades de crecimiento poblacional (Bosa, Ciudad Bolívar, por ejemplo), mientras que en otras ocurre disponibilidad de infraestructura con bajo crecimiento de la población en edad escolar. A dichas circunstancias se añaden los retos que entraña la educación prescolar de 3 grados y la expansión de la jornada única, como lo define la Ley General de Educación[2] y el Plan Distrital de Desarrollo de la administración actual.

Si bien es clara la transición demográfica en el país y en las principales ciudades latinoamericanas, es importante continuar con una inversión sostenida en infraestructura educativa como lo ha tenido la administración distrital actual:

  • Aún hay retos en acceso y permanencia escolar. Bogotá ha logrado avances significativos en la universalización de la cobertura educativa, tanto así que la tasa de asistencia escolar de Bogotá en 20 fue del orden del 96,4% 22, según las cifras calculadas a partir (GEIH - DANE), lo que representa un crecimiento cercano a los 2 puntos porcentuales si se compara con la cifra del 2019. A pesar de estos avances y de la disminución de la deserción escolar (actualmente es de 1,29%, la cifra más baja en los últimos 30 años), parte de esa deserción tiene que ver con las condiciones de infraestructura. Según la Encuesta Distrital de Deserción Escolar (EDDE) de 2019, el 10,3% de los estudiantes de los grados 5º a 11º que alguna vez había desertado, lo hicieron porque consideraban que las instalaciones del colegio eran desagradables.
     
  • El reto de que los niños estudien cerca de su lugar de residencia. Vale recordar que, a la fecha, la ciudad beneficia con transporte o movilidad escolar a cerca de 60 mil estudiantes, los cuales, por falta de infraestructura, no se pueden atender en colegios cercanos a sus respectivos lugares de residencia. Una atención más cercana al hogar de dicha población no sólo generará beneficios sociales en términos de calidad de vida a dichos niños y niñas, sino permitirá cumplir el propósito de proximidad del Plan de Ordenamiento Territorial y contribuir a la movilidad en la ciudad.
     
  • Los retos de la jornada única.  Avanzar en el ideal de contar con Jornada Única para el 100 por ciento de los colegios distritales implica generar más de 275.000 cupos, lo que supone un gran esfuerzo en recursos financieros, humanos y de infraestructura.  Por ello el énfasis en que los colegios nuevos y las restituciones prioricen una mayor cantidad de cupos para la jornada única. 
     
  • Los retos del preescolar de tres gradosBogotá es pionera en el país en la atención de niños desde los 3 años y eso significa enormes retos con nueva infraestructura.  En este último frente, por ejemplo, esta Administración construyó cinco sedes de primera infancia y dejará contratadas o en obra otras 7 sedes.   Es decir, además de la construcción de colegios, la Administración dejará por lo menos 12 nuevas sedes de primera infancia en la ciudad.
     
  • Los retos de la infraestructura vetusta. Esta Administración no sólo construye colegios nuevos en lotes nuevos, sino también colegios nuevos en lotes existentes. De los 70 proyectos mencionados, 30 corresponden a procesos de restitución. Dicha situación se da porque aún tenemos infraestructuras físicas muy antiguas en algunas zonas. Cerca del 25% de las sedes en Bogotá se construyeron antes de la década de los 80, en la que el país realizó las primeras normas de sismo-resistencia
     
  • Los procesos demográficos son diferenciados. Se perciben tendencias territoriales diferenciadas, en la zona de los borde sur y occidental (Bosa, Kennedy, Suba) se observa un comportamiento diferencial demarcado por mayor crecimiento y concentración de la población en edad escolar, contrario a lo que se observa en localidades como Barrios Unidos, Teusaquillo, Chapinero o Puente Aranda. Por ello, la mayor construcción de colegios está concentrada en las localidades de mayor crecimiento.
     
  • Los temas de migración. En Bogotá la reducción del crecimiento poblacional ha implicado que la migración interna tenga un rol más protagónico sobre el aumento poblacional, demarcada por grupos poblacionales, como, por ejemplo, población víctima del conflicto o más recientemente la población venezolana. El sistema educativo en la ciudad, por ejemplo, paso de atender menos de 10 mil estudiantes venezolanos hace 5 años, a más de 60 mil en 2023.
     
  • La forma de ocupación del territorio y los retos de integración. Bogotá viene experimentado un proceso de expansión urbana que produce más unidades residenciales, a partir de la implantación del modelo de viviendas multifamiliares (apartamentos) generando mayor demanda de la prestación del servicio educativo en algunas zonas de la ciudad. A esto se suma el desarrollo de planes parciales, en donde es clave la planeación para que en dichos lugares se tenga infraestructura educativa y del cuidado para la atención de dichas familias. De otro lado, las dinámicas de la ciudad al hacer parte integral del sistema de ciudades del área metropolitana generan mayores movimientos de población en edad escolar hacia la ciudad.

Nuestra gran apuesta

La garantía al derecho a la Educación es el objetivo primordial de la SED, todas las acciones que adelanta la entidad son para garantizar el derecho a la educación de todos las niñas, niños, adolescentes, jóvenes y personas adultas de Bogotá.  La actual administración en el marco del Plan de Desarrollo del Distrito Capital 2020-2024 “Un Nuevo Contrato Social y Ambiental para la Bogotá del Siglo XXI”, formuló como uno de sus objetivos lograr una “Educación para todos y todas: acceso y permanencia con equidad y énfasis en educación rural”.

Siguiendo lo anterior, la proyección de infraestructura educativa se fundamenta en el reconocimiento del derecho a la educación de calidad, al tiempo que reconoce el cambio del modelo de ordenamiento hacia una ciudad de la proximidad y la vitalidad, conforme lo define el Plan de Ordenamiento Territorial “El Renacer de Bogotá 2022-2035”, en el cual, la educación se articula al Sistema del Cuidado, y garantiza la accesibilidad y asequibilidad mediante la proximidad de los servicios en cuyo desplazamiento a través de medios no motorizados o en transporte público su recorrido sea menor a los 30 minutos.

En línea con lo anterior, los nuevos colegios están articulados al Sistema Distrital del Cuidado, diseñados con espacios propicios para que las universidades vayan al colegio, para que exista formación de adultos en jornadas complementarias y a través de modelos educativos flexibles, para que la comunidad vecina use los espacios para actividades culturales o recreativas, entre otros.

Por tal motivo, esta Administración está haciendo la mayor inversión en infraestructura y dotaciones para el aprendizaje, la más grande que ha tenido la ciudad en su historia, comparado con cualquier otro plan de Gobierno.  La Administración Distrital estableció inicialmente como  meta la entrega de 35 colegios nuevos y restituidos como parte del Plan Distrital de Desarrollo; sin embargo, atendiendo las necesidades de la ciudad en cuanto a infraestructura educativa y sus apuestas en el Plan de Ordenamiento Territorial, la Secretaría de Educación Distrital contempla dejar adicionalmente a la meta inicial, por lo menos otras 35 sedes educativas en las diferentes localidades de la ciudad en etapa de diseños con licencia de construcción, contratados o en ejecución de obra. Sumado a lo anterior, dejaremos lotes listos para otros colegios nuevos o restituciones que puedan desarrollar otras Administraciones en el futuro.

Ubicación de los 70 proyectos de infraestructura educativa desarrollados en la Administración de Claudia López

70 proyectos infraestructura de educación

Un aspecto significativo de la inversión en infraestructura educativa es que, por primera vez, se están haciendo procesos de mejoramiento o renovación en el 100% de la infraestructura educativa existente en la ciudad.  Serán más de 700 intervenciones, conforme al análisis particular de las condiciones de cada una de las sedes educativas, en la cual se incluyen aspectos tales como:  mejoramiento de aulas de aprendizaje, reemplazo de cubiertas, modernización de redes, construcción de comedores escolares, baterías sanitarias, mejoramiento de servicios públicos y redes, adecuación de espacios deportivos y zonas libres, entre otros. A la fecha se han hecho obras de mejoramiento y renovación en 602 sedes educativas.

De igual manera, la Administración ha realizado la adquisición y puesta en operación publica de antiguos colegios privados, algunos mediante compra o entrega gratuita . Así, por ejemplo, en el periodo de gobierno actual se logró adquirir seis sedes educativas, 4 en la localidad de Suba, 1 en la localidad de Santafé y 1 en la localidad de Rafael Uribe.

Ampliar, mejorar y mantener la infraestructura educativa de la ciudad no fue una tarea fácil. Tuvimos que realizar la construcción de manera simultánea con la mitigación de los efectos de la pandemia por Covid-19 en el sector educativo. Evidentemente, la pandemia afectó el sector de la construcción a nivel mundial, la disponibilidad de insumos y materiales, así como las fluctuaciones de precios, como producto de la pandemia por Covid-19 y del contexto económico mundial.

En ese sentido estamos respondiendo tanto con la proyección de nueva infraestructura para la ciudad como la renovación de la infraestructura existente y dotaciones para responder a los retos del siglo XXI.

El enfoque de los nuevos colegios en términos de innovación educativa

La nueva infraestructura educativa tiene como énfasis el desarrollo integral de la primera infancia, la jornada única, la educación inclusiva, la cobertura en las zonas deficitarias y la transformación pedagógica con espacios de aprendizaje colaborativo y dotaciones pertinentes, buscando priorizar:

  • Espacios diseñados para la trayectoria completa: espacios de aprendizaje para los más pequeños y herramientas para la articulación con la Educación Superior. Estas infraestructuras cubren ciclos educativos completos de manera integral y autónoma de acuerdo con los ambientes pedagógicos básicos y complementarios definidos en la NTC 4595, que permitan garantizar la calidad de la respectiva capacidad instalada.
  • Espacios para la jornada única, con espacios para la formación integral (espacios de danza, música, deportes, etc.) y con las respectivas áreas de apoyo, como el comedor escolar.
  • Diseño innovador para los nuevos retos del aprendizaje. Innovación tecnológica y uso de nuevos apoyos tecnológicos para el aprendizaje.
     
  • Diseños verdes y sostenibles, promoviendo la eco sostenibilidad. Eficiencia energética, iluminación sostenible, eficiencia en el manejo de agua y gestión de residuos. Se incorporan por primera vez dentro de la operación nuevas estrategias cómo la implementación de energías limpias y alternativas con paneles solares, el uso de recirculación de aguas lluvias, iluminación LED de características ahorradoras, entre otras.
     
  • Colegios más cercanos integrados a otros equipamientos, como el Sistema Distrital del Cuidado. Es decir, los colegios se usan igualmente para la formación de adultos en jornadas  complementarias y modelos educativos flexibles; articulación con la educación superior; uso de espacios para actividades culturales o recreativas de las familias vecinas, entre otros.

En conclusión, la estrategia de infraestructura educativa ha contribuido a cerrar las brechas, brindando espacios para las trayectorias educativas completas (desde la primera infancia y en articulación con la Educación Superior), la formación integral y con diseños del Siglo XXI, con ambientes sostenibles e inclusivos que contribuyan a la transformación pedagógica. De igual manera, con el componente de conservación de establecimientos educativos mejoramos la calidad de vida de los estudiantes, docentes y comunidad educativa de los colegios públicos, contribuyendo a la permanencia escolar y al cierre de brechas educativas.

Sede María Cristina Salazar

Sede María Cristina Salazar

Abel Rodríguez

Colegio Abel Rodríguez Céspedes

 

Referencias

Bayona Rodríguez, H. (2016). Efectos de la infraestructura sobre el fracaso escolar: evidencia empírica para Colombia. Voces y Silencios. Revista Latinoamericana de Educación, 7(2), 19-40.

Bowers, A.J. y Urick, A. (2011). ¿Does High School Facility Quality Affect Student Achievement? A Two-Level Hierarchical Linear Model. Journal of Education Finance, 37(1), 72-94.

Durán-Narucki, V. (2008). School Building Condition, School Attendance, and Academic Achievement in New York City Public Schools: A Mediation Model. Journal of Environmental Psychology, 28(3), 278–286.

Maxwell, L. E. (2016). School building condition, social climate, student attendance and academic achievement: A mediation model. Journal of Environmental Psychology, 46, 206-216. https://doi.org/10.1016/j.jenvp.2016.04.009

Finnegan, W. (2023). Connecting energy research and social sciences: Practices and practice architectures in secondary schools in England. Energy Research & Social Science, 102. https://doi.org/10.1016/j.erss.2023.103186

[1] Parte de esta sección fue construida conjuntamente con Jeysson Daza, profesional de la Subsecretaría de Acceso y Permanencia.

[2] Artículo 85 de la Ley General de Educación “El servicio público educativo se prestará en las instituciones educativas en una sola jornada diurna”