Yomaira Bernal Pérez
Licenciada en Psicología y Pedagogía de la Universidad Pedagógica Nacional, Bogotá, Colombia; Magíster en Trabajo Social de la Pontificia Universidad Católica, Valparaíso, Chile. Docente Orientadora del Colegio IED Antonio José de Sucre.
Omar Giovanny Pulido Niño
Licenciado en Psicología y Pedagogía de la Universidad Pedagógica Nacional; Magíster en Creación Literaria de la Universidad Central, Bogotá, Colombia. Docente Orientador del Colegio IED Estrella del Sur.

Estrategia Mariposa: innovación para una orientación escolar sensible al contexto

Miradas a la educación

Yomaira Bernal Pérez y Omar Giovanny Pulido Niño
Segundo puesto en el XVI Premio a la Investigación e Innovación Educativa (2022). Categoría Innovación


La metáfora de la metamorfosis es el mensaje central que contiene La Estrategia Mariposa. Esta innovación encarna una transgresión que contesta las maneras tradicionales de gestionar la orientación escolar y desarrolla una propuesta para la promoción de la salud mental y la prevención de riesgos psicosociales en los contextos educativos.

La transformación en la Escuela se plantea desde la posibilidad de pensar otros registros en los cuales la orientación escolar tiene oportunidad de descubrir, desarrollar e incidir desde una actuación efectiva y afectiva en escenarios pedagógicos que aborden la salud mental, haciendo énfasis en la capacidad de comprensión e interpretación del mundo situada en las miradas de la comunidad, con el fin de adquirir y validar significados nuevos acerca de los roles de cada ser humano en los ámbitos personal, social, cultural y académico. Esta experiencia apuesta por la construcción de espacios para dialogar sobre la vida.

La Estrategia Mariposa es una propuesta que toma como postulado central el enfoque enactivo, uno de los planteamientos de Francisco Varela (1997 p.177), que se ubica más allá del mundo biológico y aporta elementos de análisis en relación con el ámbito social; de acuerdo con esta mirada, los seres cognitivos no representan un mundo preconcebido, ya que la cognición consiste más bien en un proceso donde se entiende que el conocimiento es el resultado de “Una interpretación que emerge de nuestra capacidad de comprensión”.

Luego de este breve contexto general de la propuesta, se expondrán a continuación los planteamientos más relevantes que la animan; de esta manera evidenciamos de qué modos la experiencia del docente orientador explora la resignificación de diferentes situaciones escolares, incluyendo la manera en que se relaciona consigo mismo y con el entorno en procura del cuidado de la salud mental de todos los actores que confluyen en el contexto escolar. De esta forma la Escuela deviene en un espacio que hace posible nuevos encuentros y se convierte en un territorio de puertas abiertas que favorece la interacción comunitaria al facilitar otras formas de ser, estar y actuar en ese espacio que, por excelencia, debe ser tanto dinámico como edificador.

¡Apareamiento y fecundación!

Algunas nociones que configuran una línea de análisis y puesta en obra de un mundo posible  se articulan a partir de tres situaciones que acontecen en el territorio escolar y, ciertamente, se agudizan: la primera,  la  incertidumbre de las  familias  frente a  las crisis y sus distintas causas, lo que conlleva a una resignificación de la Escuela de Padres en los colegios; la segunda, los adversos efectos económicos generados  por la pandemia del Covid 19 (años 2020 a 2022), reflejados en las serias dificultades alimentarias que se derivan de la pobreza extrema de buena parte de la población en países como Colombia; y la tercera, el incremento de los problemas de salud mental en la comunidad educativa. Estas situaciones fecundan la posibilidad de crear estrategias que comprendan, desde otros lugares, la intención pedagógica de la orientación escolar.

Metamorfosear la Escuela de Padres —Hablemos del huevo—

La Estrategia Mariposa impacta en los modos de ser, estar y hacer en la comunidad escolar, entendidas estas acciones vitales desde la metáfora del ciclo de la mariposa. La primera etapa de este ciclo, denominada Huevo, recoge el momento en el que nacen las Chocolatadas de Familias, que tienen como objetivo principal aprender sobre el afecto a través de vivencias corporales, como escuchar música en vivo, en un espacio dispuesto para el encuentro y el disfrute, mientras se comparten la mesa y el chocolate caliente como ritual de cercanía con parejas y acompañantes. Es un espacio para el consentimiento y el aprendizaje que, a su vez, contribuye a la disminución del estrés, al cuidado de la salud mental a partir del reconocimiento del otro, para disfrutar, volver al amor y otras prácticas de cuidado.

Apoyados en las tensiones explicitadas y expuestas por Francisco Varela (2010), quien sintetiza en los siguientes términos los modos como nos aproximamos al conocimiento materializado en la práctica pedagógica: “Comenzamos con la línea dura de la ciencia cognitiva y nos desplazamos hacia lo que podría considerarse su periferia, esto es la consideración del contexto circundante y los efectos de la historia biológica y cultural sobre la cognición y la acción” (2010, p.214), se detectaron cinco contrastes como línea de identificación de un desde con proyección a un hacia. A continuación, se enuncian cada uno de ellos:

1. Desde lo conservador hacia el reconocimiento de las diversas composiciones familiares.

2. Desde las formas tradicionales de Escuelas de Padres hacia la movilización de Encuentros de Familias.

3. Desde el saber experto hacia un lugar protagónico de los saberes de la comunidad.

4. Desde la descontextualización hacia una lectura del contexto como acción pedagógica transversal para la innovación.

5. Desde la escuela cerrada hacia una Escuela Abierta que genera articulaciones para trabajar con redes comunitarias e interinstitucionales.

Estas apuestas pedagógicas han consolidado una alternativa que busca fortalecer los vínculos Familia-Escuela.

Metamorfosear en la pandemia. Emergencia del Ciclo Oruga

Las orugas crecen y mudan; comen ‘como si no hubiera un mañana’ porque —en cierto modo— no lo hay. ¡La metamorfosis lo cambia casi todo! Ese es el contexto de este ciclo. Familias con necesidades alimentarias insatisfechas en medio de los cambios producidos por la pandemia del Covid-19; de allí, la importancia de reflexionar y materializar la agencia de una acción situada y presencial de la Orientación Escolar, asumida en perspectiva de la mirada encarnada propuesta por Varela, la cual permitió espacios de escucha y contención emocional para canalizar lo generado durante el aislamiento; todo ello mediado por la entrega de paquetes alimenticios a las familias que más lo necesitaban, gestionados con el apoyo de la comunidad. En este proceso se vivió y se aprendió en la práctica acerca de la solidaridad y el trabajo conjunto, una ganancia para fortalecer el tejido social.

Metamorfosear las crisis en salud mental: La Crisálida

La siguiente fase del ciclo, denominada Crisálida, representa uno de los grandes retos que enfrentan las instituciones educativas y está relacionada con la crisis en salud mental que durante los años 2021 y 2022 aumentaron considerablemente a nivel mundial. En este contexto emergieron procesos demostrativos de cambio, que incluyen la creación de una cartilla pedagógica como dispositivo que conecta la dimensión biológica con la reflexión en relación con las situaciones de salud mental para ser abordada en un espacio físico de enseñanza, aprendizaje y encuentro, lugar creado a partir de la propuesta denominada Crisálida, en donde puede observarse el ciclo de vida de la mariposa desde un micro-artefacto, mientras se habla, se escucha, se escribe y se reflexiona.

A través del dispositivo y preguntas relacionadas con la metamorfosis y la observación del ciclo de la mariposa, se vinculan temáticas de salud mental como afrontamiento del duelo, manejo de emociones, problemáticas familiares, sentido de vida, entre otros y, de acuerdo con las exploraciones y reflexiones de cada participante, se acompaña la creación del registro de narrativas, para que desde la realidad, la ficción o la ensoñación se motive a la escritura y creación de nuevas perspectivas ante las dificultades.

Para la observación del ciclo de la mariposa se cuenta con un micro artefacto pedagógico, allí los estudiantes observan la planta Capuchina y se hace el reconocimiento de los huevos, orugas, pupas o crisálidas y, posteriormente, la mariposa.

En la crisálida que crean las mariposas el cuerpo muta; al parecer, solamente quedan vivos el cerebro y el corazón. Mientras permanecen aparentemente inmóviles todo su cuerpo se transforma… En ocasiones, los seres humanos también necesitamos ese espacio, por eso, se busca que la Crisálida sea un espacio físico para que estudiantes, familias y docentes tengan una pausa para llorar, meditar, orar, pensar o expresarse mediante la escritura; también es un lugar que facilita la recolección de narrativas para la edición de un libro en ciernes, cuyo título es Alas de mariposa.

En síntesis y siguiendo a Bachelard (2000, p.113) los orientadores en Colombia debemos considerarnos “como conquistadores de lo posible, no como los archivistas y repetidores de lo ya conocido”; de este modo podemos contribuir a las transformaciones que requieren la Escuela y el mundo.

Eclosión de la mariposa... Apertura indispensable para un contexto que muta

Presenciamos El fenómeno de la vida, título del libro de Francisco Varela, soporte teórico fundante de esta experiencia, cuyo aporte central es revelar al ser humano, no como agente que descubre el mundo, sino como parte constitutiva de él; en este sentido, se avanza sobre el postulado “(…) la vida y la cognición son activamente realizadas por un agente, un ser autónomo que no experimenta un encuentro pasivo con el mundo, sino que crea un mundo de significado desde dentro”. (Varela, 2010, p.115).

A través de esta experiencia se evidencian algunas dificultades que el docente orientador puede encontrar en el entorno escolar con respecto a situaciones personales, sociales, culturales y académicas que afectan el proceso educativo, y la manera como pueden gestionarse diferentes mecanismos para abordarlos; se reconoce que los procesos educativos, cuando son simbióticos, orgánicos y cuentan con la participación de todos los actores, generan resultados benéficos para toda la comunidad, de ahí la importancia del orientador para gestionarlos y articularlos.

Existen argumentos sobre los que Varela disertó a propósito de la generación de alternativas que conviene retomar y destacar en este cierre-apertura del recuento de lo que ha sido y es La Estrategia Mariposa. El autor hace un llamado a "(…) cultivar sensibilidades propias" y no hacer "(…) eco de tendencias de otras latitudes" (Varela, 2010 p. 451); en esta línea es clave volver la mirada hacia lo que el contexto revela y atender las dinámicas que surgen en nuestras comunidades, en función de su comprensión. También es importante reflexionar, sistematizar y compartir experiencias que pueden aportar contextos análogos, en procura de soluciones vitales y de fondo a problemáticas sensibles de las comunidades educativas.

La aspiración de cultivar lo propio es, ciertamente, un desafío; por ello, elementos particulares del contexto devienen en material reflexivo, sensible y práctico: ¡útil! Este principio contribuye a consolidar comunidad, y al hacerlo perdura en el tiempo, se fija en la historia y se integra a las dinámicas educativas- comunitarias, como parte de la exploración de nuevas acciones y propuestas realizadas desde la orientación escolar.

La existencia de una mariposa puede ser muy breve, pero el ciclo que alimenta y permite esa bella y efímera vida es complejo y duradero, constante. Se repite de manera permanente y esparce por el cielo nueva y colorida vida... Esta Estrategia se ha instalado de forma lenta, ha vivido transformaciones, tomándose los tiempos necesarios y, hasta ahora, ha alcanzado la fuerza suficiente en sus alas para desplegarse y viajar hacia nuevos lugares.

Al igual que La Estrategia Mariposa, la comunidad escolar ha tenido la posibilidad de identificar que no solamente hay una transformación, sino que esta es una constante en el cotidiano; tras cada paso, decisión, dificultad o palabra dicha se espera, desde el papel que desempeña la orientación escolar, facilitar espacios de transformación personal, institucional y social, teniendo como principio el bienestar de los seres humanos que confluyen, vitales, en los espacios educativos.

Referencias 

Bachelard, G. (2000). La poética del espacio, México. D.F.: Fondo de Cultura Económica.

Varela, F. (1997) De cuerpo presente. Las ciencias cognitivas y la experiencia humana. Barcelona: Editorial Gedisa.

Varela, F. (2010). El fenómeno de la vida, Buenos Aires: Granica.