Integración de la educación socioemocional y ciudadana: un desafío pedagógico

Una razón entre múltiples razones

La naturalización de la violencia en nuestro hacer cotidiano, resultado de un largo conflicto armado, una historia de brechas sociales e inequidades, y recientemente por los efectos de la pandemia, afirman la responsabilidad del sistema educativo de asumir clara e intencionadamente la educación socioemocional y ciudadana como parte del proceso educativo de estudiantes, docentes y familias.

Esta tarea éticamente necesaria, sí lo que se quiere es un verdadero cambio social y una cultura de paz, implica entre otros asuntos, revisar las formas en las que se ha comprendido la labor formativa de la escuela, la participación escolar en clave de la relación con el entorno, el diseño currícular y el desarrollo de los proyectos educativos institucionales, como expresión del horizonte común, los principios y las formas acordadas para la gestión escolar en una comunidad educativa.  

En el marco de la implementación del programa Integral de Educación socioemocional, ciudadana y escuelas como territorios de paz y del diálogo con las comunidades educativas, se han identificado tres aspectos importantes en relación con la necesidad de integrar la educación socioemocional y ciudadana en la escuela:

• La formación debe ser integral:  Se requiere superar la separación existente entre los saberes teoricos y los prácticos o vivenciales y comprender que la conjugación de ambos permite el desarrollo de capacidades para el Ser, el Saber y el Hacer desde la capacidad resolutiva y creativa ante problemas y situaciones de diversa indole.
• Se aprende más allá del aula y en contexto: Comprender que la experiencia de aprendizaje tiene lugar en todos los espacios de la vida y en particular la formación ciudadana es un aprendizaje resultante de la interacción, la conversación, el cuestionamiento, el pensamiento crítico y la vida en comunidad.
• Comprender la educación socioemocional y ciudadana como una apuesta política: Entender la escuela y sus entornos como aulas vivas y el rol de la educación en la construcción de un proyecto de vida en condiciones de libertad, dignidad, no violencia  y oportunidades para el Buen Vivir.

Así mismo, en el desarrollo de este programa se han precisado las comprensiones que se tienen sobre educación socioemocional y ciudadana, entendiendo la Educación Socioemocional como punto de partida en el reconocimiento de la centralidad de las emociones en el proceso formativo. Para ello es necesario superar la separación entre la racionalidad y emocionalidad del ser humano, y ubicar lo socioemocional como una dimensión inherente a la sociabilidad humana, conectada con los órdenes sociales predominantes y el contexto. Es decir, comprender que las emociones no dan cuenta únicamente de una interpretación individual de la realidad, sino también del entramado de relaciones en las cuales emerge la afectividad.

En el caso de la educación ciudadana, la misma es el resultado de un proceso de construcción de saberes y experiencias a lo largo de la vida en diferentes dimensiones (personal, sistémica, societal) y como una práctica permanente vinculada a las relaciones de poder, la construcción y la toma de decisiones sobre el destino personal, comunitario, social.

No se entiende la educación ciudadana sin considerar la importancia y la centralidad del poder y de lo político en los procesos de aprendizaje. Por lo tanto, formar en ciudadanía será una práctica dinámica que potencie el desarrollo del ser a través de una constante construcción de sí mismo, a partir de prácticas reflexivas críticas, así como de la participación en la construcción de una sociedad más justa, equitativa e incluyente y en la toma de decisiones que incidan en el contexto social, natural y cultural.

Siguiendo la línea reflexiva de Martha Nussbaum, se han identificado las capacidades esenciales a desarrollarse en los y las estudiantes y comunidades como parte del proceso de educación socioemocional y ciudadana: 

a) Participación,

b) Sentido de la vida, el cuerpo y la naturaleza,

c) Comunicación,

d) Identidades, pensamiento y memoria crítica,

e) Sensibilidad y gestión emocional,

f) Creatividad e innovación.

Entendiendo que las capacidades no hacen referencia únicamente a habilidades individuales, sino que tienen una relación directa con las particularidades del contexto en el que están inmersos los sujetos en términos materiales o estructurales, es necesario propiciar algunas condiciones que permiten integrar la educación socioemocional y ciudadana:

• Trascender las relaciones de poder jerárquicas, por unas relaciones más horizontales en tanto somos sujetos en igualdad de derechos, capacidades y conocimientos.
• Es fundamental que los procesos pedagógicos de integración curricular y el desarrollo de capacidades respondan a las necesidades e intereses de la comunidad educativa.
• Hacer de la investigación un proceso inherente a la reflexión y acción pedagógica, que nos permite indagar y reconocer las condiciones y elementos históricos en relación a las problemáticas y necesidades del contexto, pero también de las fortalezas, logros y capacidades individuales y colectivas

Cómo hacerlo;  principios, metodo, aprendizajes.

La integración de la educación socioemocional y ciudadana debe contemplar por lo menos tres principios básicos:

Es interdisciplinar

Asume la integración de saberes y conocimientos en función de comprender una situación, un fenomeno o problema en su totalidad y complejidad, así como construir una solución integradora. La formación emocional y ciudadana no se instala unicamente en las ciencias sociales o en la orientación escolar, seguramente, algunos conocimientos y saberes en específico encuentran su lugar allí, sin embargo, por tratarse de emociones, actitudes, motivaciones, conocimientos y prácticas culturales, todas las disciplinas tienen injerencia, ya lo hacen de manera implicita, pero hacerlo bien, significa darse cuenta y asumir dicha responsabilidad.

Es sistemática e intencionada

La integración de la educación emocional y ciudadana no es algo que deba responder al azar, a la fragmentación y polarización disciplinar y por ende resignarse a la solicitud reiterada y siempre en espera de espacios y tiempos en el plan de estudios. Es el resultado de una decisión, un proceso sistemático, con claridad en los objetivos, los aprendizajes esperados y las responsabilidades de todos los actores, pero por, sobre todo, el liderazgo de directivos docentes y docentes. Quienes se proponen la integración de la educación socioemocional y ciudadana no estan disminuyendo o debilitando los planes escolares, por el contrario, los están orientando hacia una verdadera transformación.

Es participativa

El proceso de integración debe comprometer el liderazgo, la disposición, la capacidad creativa y de cooperación de todos los integrantes de la comunidad educativa.  Como se ha señalado, no corresponde únicamente a los docentes de ciencias sociales o de orientación escolar. La labor propuesta inicia por el convencimiento de los directivos docentes, los docentes de manera individual, y en las instancias colectivas de reflexión y acción académica. Involucra también a las instancias del gobierno escolar, las familias y de manera especial, en un próposito de abandono del adultocentrismo, cuenta con las voces de los estudiantes, ayudando así a fortalecer su capacidad de participación e incidencia en los cambios escolares. 

La Reflexión- Investigación- Acción- Participación:  RIAP.  

El Programa Integral de Educación Socioemocional, Ciudadana y Escuelas como territorios de paz, propone, a partir de sus antecedentes, como el PECC (2012-2016), retomar planteamientos de las pedagogías críticas, un método pedagógico que considere a la comunidad educativa como sujeto político, participativa y agente de transformaciones sociales y culturales y que, en coherencia con ello, dirija sus esfuerzos en la creación de espacios diversos, críticos y transformadores. En concordancia con lo anterior, se retoma el método de la Reflexión- Investigación- Acción- Participación:  RIAP, basado también en los planteamientos de Paulo Freire y de las pedagogias del sur.

La anterior perspectiva plantea cuatro momentos pedagógicos y unas entradas metodologicas posibles para avanzar en  integrar la Educación Socioemocional y Ciudadana.

Los momentos pedagógicos

1)    Incitando Ideas

En este momento las y los miembros de la comunidad educativa reconocen las particularidades de su contexto, los intereses, potencialidades, retos de su escuela y comunidad e identifica las capacidades socioemocionales y ciudadanas susceptibles de fortalecerse para la transformación de sus realidades.

2)    Pensarse y pensarnos

Durante esta fase se implementa la propuesta para el fortalecimiento de las capacidades socioemocionales y ciudadanas y se busca la construcción colectiva de conocimientos a través de diálogos intergeneracionales, interculturales e interdisciplinares en las que son importantes establecer estrategias y formas de divulgación de las experiencias.

3)    Fortaleciendo saberes y redes

En este momento se consolida la propuesta para el fortalecimiento de las capacidades socioemocionales y ciudadanas teniendo en cuenta los caminos elegidos para su integración. Se proyectan las líneas de acción y se estimula la conformación de redes de aprendizaje y práctica que continúen fortaleciendo dichas capacidades en las comunidades educativas.

4)    Reconstruyendo saberes

Este momento es transversal al desarrollo de la ruta pedagógica y propone retroalimentar cómo se ha integrado el fortalecimiento de las capacidades socioemocionales y ciudadanas en las áreas académicas, los proyectos transversales, los planes institucionales, el PEI, y las áreas de gestión escolar.

Los tres primeros momentos permiten su tránsito de manera cíclica, interrelacionada y constante acorde a las particularidades de cada colegio, mientras que el último momento es transversal al proceso.

Teniendo en cuenta que la integración de la Educación Socioemocional y Ciudadana es un proceso que debe estar anclado a las experiencias y trabajos propios de cada comunidad educativa, se identifican algunos de los caminos posibles para hacerlo:

• Integración por temas: En este camino la educación socioemocional y ciudadana necesita un espacio particular en el currículo y los aprendizajes no quedan exclusivamente en áreas como ciencias sociales, ética y valores, sino que, a partir de un tema de interés, diferentes áreas coordinan actividades, en las cuales se permite involucrar a varios actores de la comunidad educativa.

• Integración por actividades: Este tipo de integración es más práctico y tiene como objetivo realizar procesos alrededor de una o varias actividades y no profundizar en un tema, esto permite incentivar la participación de la comunidad educativa.  
• Integración por problemas: Este inicia por identificar los problemas escolares y su entorno, lo cual puede estimular en las y los estudiantes buscar alternativas de solución a sus necesidades y requerimientos próximos, generando acciones de recolección y análisis de información, así como alternativas de solución, permitiendo alcanzar aprendizajes significativos para impulsar procesos de transformación de la realidad. 
• Integración por proyectos pedagógicos e iniciativas comunitarias:   Esta modalidad se desarrolla por medio de secuencias de tareas con intencionalidad pedagógica y práctica que permiten aprender haciendo y trabajo colaborativo, en la interacción entre los miembros de la comunidad educativa, el autoaprendizaje, la planeación y la aplicación de conocimientos disciplinares en ideas o propuestas de niños y niñas.  
• Integración en torno a un relato: Esta es una oportunidad para generar diálogos intergeneracionales con integrantes de la comunidad educativa y privilegiar la oralidad en la construcción de saberes y memoria colectiva. Permite problematizar, indagar y conocer la historia de aspectos socioculturales que se evidencian con los enfoques diferenciales.  
• Integración en torno a un tópico generador: Este camino otorga un lugar significativo a la pregunta, surgida de una problematización teórica en la que se genera un ejercicio de consulta multidisciplinar para su comprensión y resolución. Por ejemplo, un tópico generador sobre la educación socioemocional podría girar en torno a cómo las condiciones sociales y económicas pueden afectar la salud mental de las personas.

Qué aprendizajes podríamos esperar y evaluar

Dado que el enfoque que plantea esta propuesta de capacidades entiende que la capacidad de ser o hacer algo no depende únicamente de habilidades individuales, sino que también requiere de unas condiciones que permitan desarrollar plenamente la potencialidad de los miembros de la comunidad educativa, se presentan a consideración una serie de aprendizajes en los que se incluyen conocimientos contextualizados que involucren procesos de investigación, de apropiación colectiva sobre saberes construidos y de cuestionamiento constante que permita dinámicas  de construcción/ deconstrucción del saber. Se propone una ruta curricular que relaciona aprendizajes, ciclo y capacidad socioemocional y ciudadana, elementos que también serán centrales en una evaluación de proceso.  Algunos ejemplos:

La interacción con la familia, personas y elementos de la naturaleza para indagar a partir de la curiosidad, las sensaciones en el mundo que nos rodea frente al Sentido de la vida, el cuerpo y la naturaleza (Ciclo Inicial).

Promoción de ambientes de respeto y confianza en los que se expresa y reconocen las emociones propias y de las y los compañeros, así como de otras personas que nos rodean, relacionada con la Sensibilidad y gestión emocional / Cuidado de sí y de la alteridad. (Ciclo II)

La proyección de acciones colectivas para la transformación de la escuela y el territorio, estableciendo relaciones horizontales y de confianza que permitan el reconocimiento de tiempos, espacios y contextos en relación a la Participación. (Ciclo IV)

Diseño creativo y colectivo de proyectos de transformación que se implementen en las comunidades educativas. Creatividad e innovación. (Ciclo V)

La generación de ambientes, canales y recursos para las iniciativas comunicativas de las y los integrantes de la comunidad educativa visibilizando la diversidad de voces de sus integrantes y garantizando la libertad de expresión, en relación a la Comunicación. (Área Directiva)

La construcción de red de apoyo que reconoce las identidades de las personas y las familias para transformar los prejuicios sociales frente a la diversidad, correspondiente a las Identidades. (Área comunitaria)

Participación activa que cuestiona constante y colectivamente las prácticas pedagógicas para la promoción de acciones contextualizadas, críticas y autónomas de la comunidad educativa, frente al Pensamiento y memoria crítica (Docentes)

Finalmente, la invitación es a soñar y enfocar cada vez mayores esfuerzos para la construcción de una educación que no separe la razón de la emoción. Una educación que comprenda a nuestros maestros, maestras, orientadores, estudiantes y sus familias como seres humanos con los cuales compartimos una historia y un legado cultural que se entremezcla con historias familias y personales en diversos contextos que convergen en la escuela, y en lugar de abrumarnos nos resuenen cada día más como un desafío hacia el cambio cultural, la reconciliación y la recuperación del tejido social como ciudad, como país, como humanidad.

Desde la Secretaría de Educación, a través del Programa Integral de Educación Socioemocional, Ciudadana y Escuelas como Territorios de Paz, invitamos a conocer y enriquecer con su propia experiencia, la propuesta contemplada en el documento Orientaciones pedagógicas para integrar la Educación Socioemocional y Ciudadana en los Colegios de Bogotá.

REFERENCIAS

Secretaría de Educación Distrital (SED). (2014a) Documento Marco Educación para la Ciudadanía y la Convivencia. Bogotá, Colombia.

Secretaría de Educación Distrital (SED). (2022) Documento Orientaciones Pedagógicas para integrar la Participación y la Educación Socioemocional y Ciudadana en los colegios de Bogotá. Bogotá